El Castillo de San Lorenzo

Excelente opción en medio de la quebrada de San Lorenzo para tomar un café o un trago disfrutando del entorno natural, musica apasible y ambiente tranquilo. Solo pedimos te y limonada. El servicio no es el más rápido, pero sin embargo es bueno.

El Castillo es muy lindo. La habitación enorme con techos altos. El baño hecho a nuevo. La cama un tanto dura y las almohadas peor. Nos tocó una habitación con balcón lo cual fue positivo. Estuvimos solo una noche. El hotel es administrado por su dueño pero no tiene personal disponible las 24 horas, no hay una "recepción" permanente. A las 9.30 de la noche nos quisimos bañar y casi no salía agua. Faltaba toalla o alfombra de baño y solo había una toalla chica por persona. No había con quien comunic****. Enviamos un whatsapp y nos contestaron una hora y pico más tarde, cuando ya no vimos el mensaje porque estábamos agotados. Nos hicieron un buen descuento por el problema del agua y eso fue positivo aunque el mal momento lo pasamos igual. El hotel no tiene jardín ni pileta. Esta es compartida con la casa lindera. Además, estaban haciendo arreglos y había un pozo enorme en el lado de atrás para una futura cava sin ninguna advertencia de trabajos ni nada. Deberían habernos avisado de estas cuestiones antes de ir. Habíamos reservado en junio. Creo que hubiera sido mejor que no nos tomaran la reserva o nos avisaran para poder elegir si íbamos o no...

Maravilloso para conocer, te traslada como una máquina del tiempo hacia el pasado por su antigüedad, tomamos el té con torta, riquísimo y vale mucho la pena conocer! Me hubiera gustado alojarme también.

Una excelente experiencia en lugar encantador y un historia interesante que merece la pena descubrir. Gracias Maria Eugenia y a todo el staf por el cálido recibimiento y atención durante nuestra corta estadía. Muy buena también la experiencia culinaria.

Solo pase a tomar una merienda, luego de conocer San Lorenzo. El lugar es soñado. Antiguo y bello. Ambiente relax, linda música, bajo un árbol centenario. Buenas opciones de meriendas. Precios razonables. Al ser un lugar con historia, estaría bueno que permitan conocer y recorrer el lugar a los que se acercan, ya que al ingreso tiene la referencia de su historia.

El castillo de San Lorenzo sin dudas es un lugar para visitar, construido en 1903 es una réplica de un castillo fiorentino del norte de Italia. La comida es excelente a precios accesibles, pedimos unas empanadas muy buenas, una berenjena asada excelente y unas rabas que no estaban tan bien, por eso no llega a 5 estrellas. Pero quizás elegí mal pedir rabas en ese lugar, debería haber ordenado uno de los platos de autor que tienen. La atención es muy cordial, el lugar es impresionante, aceptan tarjetas. No abren a la noche, es casa de te hasta las 20 hs. Muy recomendable.

Una experiencia MALÍSIMA Mi familia y yo nos pedimos 3 platos de papardeles verdes( plato de pasta plana a base de espinaca con frutos de mar y una salsa). En mi plato no me vino ni un solo fruto de mar, por otra parte mis familiares comentaban que los frutos estaban durísimos y la pasta y la salsa no es espectacular. También no hay menú kids o un solo plato simple. La limonada esquisita. Solo hay 3 opciones de postres. Si mejoraría la variedad y calidad de los platos estaría pasable No sé cómo es por la parte del hotel ya que solo fue un almuerzo